ése día en mis manos no quedó
más que tu bella caracola rosa
que un día te dibuje en un verso lleno de poesía,
y curioso como soy,
y solo como estaba al apagar la luz del día
le corté ahí en donde nace su espiral perfecta,
y con ella en mis labios
le bufé con ira a la luna recordando el lunar de tu mirada,
le soplé nostalgia al verde mar de nuestra vida
que sollozaban de tristeza por perder
la ahora caracola mía,
le exhalé humedad de llanto al viento
que entendió de mi lamento
-y lo juro amor- tembló de frío,
le soplé desilusión a nuestro bello horizonte
que se comprendió ahora más como distancia
que destino como era.
El día amor que le sobré a tu vida,
ahora sabes tú,
me quedó en el corazón tu caracola rosa,
y en la vida... me sobró un suspiro.
Due® 04.10.10
No hay comentarios:
Publicar un comentario