miércoles, 5 de mayo de 2010

Acaso…


fuimos uno y sólo uno en el mismo espejo,
en la misma cama,
con las mismas ganas
soñadores artífices de sueños,
infractores de la ley que habla
de que dos materias en un mismo tiempo
es imposible que se encuentren en el mismo espacio

somos carne escrita en la esquina del papel,
piel y huesos escondidos
en el blancos vórtice del humo del tabaco,
yemas de los dedos locos sin conciencia
que escriben día a día nuestra historia
con la única intención de que tu futuro
descanse en paz sin perturbarse nunca
por tratar de entender nuestro pasado,

somos letra casi muerta encerrada
entre el titulo y el fin portada y pasta
del paradójico ataúd de tu poemario,
en la letra sin canción y sin frazada
de las once campanadas
disfrazadas del nostálgico llamado a la misa,

letra como fuego fatuo que no inflama,
acaso sólo algo, acaso sólo humo,
acaso casi luz de dos fantasmas
penando la distancia entre dos palabras
que se nos murieron de gastadas…

Due® 5.5.10

1 comentario:

Anónimo dijo...

es muy bueno tu poema felicidades