sábado, 20 de marzo de 2010

Obeso…


el tiempo no habla
no grita
no gime
no reza por él ni por nadie

el tiempo se sienta ocioso
en la banqueta a perderse
/sin complejo alguno/

en morboso silencio
mira las pieles lozanas
hasta que de horror se agrietan
se endurecen
y se convierten en barro después de haber sido polvo
y sobre de ellas se les ha llovido el alma

el tiempo es circular
y obeso
y perfecto
y ocioso

pero no habla
no grita
no gime

el tiempo es ateo prefecto

ése tic tac misterioso
es una simple medalla

una triste falacia…

Due® 20.3.10

1 comentario:

Anónimo dijo...

Quizá algún día te sorprendas al descubrir que todo ha llegado a su debido tiempo y fue de gusto impacientarte.
Te dije que tus poemas son increíbles? Sí.

entonces...un beso